Me parece muy interesante compartir con vosotros y comentar este vídeo sobre consejos para la detección precoz del ictus. El infarto cerebral, también llamado ictus o A.C.V (accidente cerebrovascular), es la causa de discapacidad más frecuente en España. La intervención en las primeras horas fundamental para evitar secuelas mayores, incluso la muerte. Por ésto es muy importante que haya difusión de este tipo de iniciativas, que dan nociones básicas pero imprescindibles de lo que se debe hacer en estos casos.
Diagnosticar no es nada fácil, y no es la intención de este tipo de campañas que seamos unos expertos en enfermedades neurológicas, pero sí que es verdad que con tres preguntas muy básicas se puede hacer ver la gravedad de una situación, valorando si es posible que se trate de un ictus, y avisando en el momento a los servicios de urgencias o acudiendo al médico para que realice el diagnóstico. Podemos intervenir de forma adecuada con preguntas muy sencillas para detectar un ictus, tal y como se explica en el vídeo.
Ante un episodio ocurrido de forma fortuita (un desmayo, la persona empieza a comportarse de forma extraña, le cuesta andar, levantar el brazo, hablar…) hagamos estas preguntas:
- ¡Habla!: Pedir a la persona que diga una frase sencilla: Por ejemplo, «el cielo es azul». Valorar si se comprende el lenguaje, si hay alteraciones, o si ni siquiera se entiende a la persona cuando habla porque no es capaz de producir palabras comprensibles.
- ¡Levanta el brazo!: Solicitar a la persona que suba el brazo (si es que hay uno que le duela, moleste…). Si le cuesta levantar el brazo, o no lo controla correctamente, se nota debilidad… sospecharemos que el problema es serio (sobre todo si no hay antecedente de golpe o lesión directa sobre el brazo).
- ¡Sonrie!: Valorar si la persona sonrie con normalidad, o bien la mitad de la boca no sonríe, incluso es posible que la comisura esté caída (es una señal que aparece con frecuencia en los ictus, sobre todo en etapas iniciales).
Si apreciamos lenguaje incoherente, debilidad o dificultad para mover el brazo o comisura del labio caída…
4. Avisar a los servicios de emergencias, explicando con detalle cómo ha ocurrido el suceso (se ha desmayado de forma repentina, ha notado que de pronto no podía mover el brazo o hablar…) y explicar las pruebas que se le ha hecho y las alteraciones más evidentes. Aunque la debilidad, dificultad al sonreir o al hablar sea leve, es motivo suficiente para acudir al médico a recibir una valoración y un diagnóstico preciso.
Como podéis ver, las preguntas son muy sencillas, y con un sólo fallo es suficiente bien para avisar a los servicios de emergencias, o para acudir al hospital a que puedan hacer una valoración profunda. Con esto no hay que alarmarse y pensar que cada vez que alguien tenga un mareo o debilidad en un brazo pueda ser un infarto cerebral, pero lo que sí está claro es que no está de más saber un poco sobre qué se puede hacer para detectar un ictus en sus primeros síntomas.
Para terminar, os dejo aquí algunos consejos sobre ictus en blogdefarmacia, que creo que también serán de vuestro interés. También os recuerdo la importancia de conocer las normas de RCP, para saber actuar ante una parada cardiorrespiratioria, que también es un problema con gran incidencia en España y otros países.
Más información sobre infarto cerebral en la Fundación Pita López, que ha realizado el vídeo, y en la Federación Española de Daño Cerebral.
Muy útil este artículo. Felicidades, Miguel. Aún recuerdo cómo en una entrega de premios a toda su carrera, Alfredo Landa se puso a hablar cosas incoherentes durante el agradecimiento en el escenario. Luego quedó en nada, pero todo el mundo se alarmó.
Hola, Carlos. Me alegro de que te haya resultado interesante. Efectivamente, hay ciertos signos que pueden hacer saltar la alarma, y es bueno conocerlos 🙂